EL GOBIERNO DE ANGEL AGUIRRE RIVERO Y LAS FUERZAS POLITICAS QUE LO MANTIENEN EN EL PODER, NO DEBEN MANIPULAR LA MUERTE DE GONZALO RIVAS PARA CRIMINALIZAR A LOS ESTUDIANTES NORMALISTAS DE AYOTZINAPA Y EXCULPARSE DE SU GRAVE RESPONSABILIDAD DE LOS DELITOS DE LESA HUMANIDAD COMETIDOS EL 12 DE DICIEMBRE DEL 2012.
Por fin se cumplió el perverso deseo del Gobierno del Estado de Guerrero y en un tercer comunicado oficial por fin acertó: el trabajador Miguel Gonzálo Rivas Cámara finalmente falleció por las quemaduras sufridas durante el incendio de la gasolinera “EVA”, provocado durante la represión a los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa el pasado 12 de diciembre del 2011.
Miguel Gonzálo Rivas Cámara, es una víctima más de la acción irresponsable de los cuerpos policiacos coordinados en el denominado Programa Guerrero Seguro y su caso debe ser parte de la investigación que lleva a cabo la CNDH, donde deben aclararse las condiciones en que se dio el incendio que lo lesionó y deslindarse la responsabilidades de manera transparente hasta dar con los culpables. Sin embargo, advertimos que la muerte de éste trabajador debe contextualizarse en el marco del conflicto que generó el gobierno estatal con su indolencia ante las demandas de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa y no en la “naturaleza perversa” de los mismos.
Llama la atención que el gobierno del Estado había estado muy interesado en manipular el estado de salud de Manuel Gonzálo Rivas Cámara para criminalizar a los estudiantes normalistas. Lo dio por muerto prematuramente de manera perversa hasta en dos ocasiones, sin ningún respeto a el y a su familia y solo con el malsano interés de responsabilizar ante la opinión pública y sin pruebas fehacientes, a los estudiantes de dicho incendio. Quisieramos ver en las autoridades y en el Gobernador Angel Aguirre, el mismo interés que han puesto en éste caso, ante los casos que reclamamos en nuestro Comité y en los casos recientes de Joel Santana Villa, Ascención Villa Santana, Marcial Bautista y Eva Alarcón, entre otros.
El intento mediático de responsabilizar a los normalistas de haber causado el incendio en cuestión hace notar más un intento por crear una cortina de humo y desviar la atención de los verdaderos responsables del conflicto y la represión, que a todas luces son el gobernador y su equipo más cercano, tratando de extrapolar y azuzar a la “manipulable” opinión pública” con los “malvados” estudiantes. Cabe mencionar que hay muchos elementos confusos que los propios medios han difundido acerca del incendio y los propios estudiantes han señalado que como estrategia, ninguno de ellos llevaba alguna prenda que lo identificara plenamente como estudiante de su escuela, lo que contrasta con las versiones que señalan a estudiantes con camisetas de Ayotzinapa como responsables del hecho. Incluso hay versiones de que los incendiarios fueron protegidos por los mismos policías. Por ello no deben adelantarse vísperas y esperar a que progrese la investigación.
Es lamentable que el trabajador haya fallecido y que su injusta muerte se sume a la de los dos jóvenes estudiantes. A nosotros como familiares y amigos de víctimas de la violencia, nos duele la muerte y desaparición de todos y cada uno de los guerrerenses que han caído y siguen cayendo en ésta absurda e interminable guerra contra el pueblo, donde nosotros siempre ponemos a las víctimas, somos estigmatizados, criminalizados y hasta eliminados por exigir justicia, como ha sucedido con Norma Andrade, Nepomuceno Moreno, Trinidad de la Cruz Crisóstomo, ente otros. Mucha razón tuvo Tomás Segovia cuando dijo que “La izquierda es la voz de los muertos”, pues la muerte de nuestros seres querido sacude y aclara nuestras conciencias y nos obliga a luchar.
Nosotros, estamos a 5 años de haber conformado nuestro Comité de Familiares y Amigos de Secuestrados, Desaparecidos y Asesinados en Guerrero y en el marco del dolor y el miedo, lo que más hemos aprendido es la capacidad del Estado mexicano y de sus distintos niveles de gobierno para mantenerse en la impunidad, evitar a la justicia y manipular a la opinión pública para esconder sus compromisos con la llamada delincuencia organizada.
Por lo anterior, rechazamos el intento del gobernador Angel Aguirre Rivero y su grupo por iniciar una cacería de brujas contra los estudiantes de Ayotzinapa, su Normal Rural y las organizaciones populares que los respaldan. Reafirmamos nuestra solidaridad y apoyo hacia ellos, demandamos el castigo a los culpables de los tres asesinatos cometidos el 12 de diciembre, nos sumamos al reclamo de que la CNDH realice una investigación imparcial y apegada a derecho, exigimos el juicio político al gobernador Angel Aguirre Rivero y seguiremos luchando por la presentación de nuestros desaparecidos y castigo a los culpables de los asesinatos de nuestros familiares, la suspensión de las órdenes de y cierre de los procesos penales a los defensores de derechos humanos, promotores y luchadores sociales, la libertad de los presos políticos y porque la seguridad pública en el estado y en el país se garantice a través de las autoridades civiles y regresen los militares a sus cuarteles.
Cuando se extinga la sombra de la represión y la impunidad, retomaremos nuestra exigencia al Gobierno del Estado de implementar un Plan de Búsqueda para dar con el paradero de nuestros desaparecidos y hacer justicia a nuestros asesinados. Por ahora seguiremos trabajando en la atención y apoyo a las víctimas de la violencia de manera autogestiva y solidaria.
COMITÉ DE FAMILIARES Y AMIGOS DE SECUESTRADOS, DESAPARECIDOS Y ASESINADOS EN GUERRERO
TALLER DE DESARROLLO COMUNITARIO A.C.
Chilpancingo, Gro. a 2 de enero del 2012
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