martes, 18 de agosto de 2009

Mala decisión, mal augurio.

Diario Libertad
Martes 18, agosto del año 2009

EDITORIAL

El que el Presidente de Colombia, don Álvaro Uribe, haya aceptado la instalación de bases militares en su territorio, fue una mala decisión, toda vez que los norteamericanos no van a hacer otra cosa que atemorizar a la región; y principalmente para tratar de controlar, que no combatir, la producción de cocaína.

Pues como bien es sabido, el Imperio del consumismo no tiene ningún interés en acabar con las drogas, sino posicionarse del mercado, es decir, controlarlo.

Como quedó demostrado en Vietnam, donde la heroína era transportada en aviones de su propia Fuerza Aérea, utilizándola para abastecer su amplio mercado de consumo.

Y desde luego para negociar con las guerrillas, como lo hacía el célebre Teniente Coronel Oliver North que por cuenta del Gobierno norteamericano, cambiaba armas por droga.

Que es la misma razón por la que se encuentran metidos en Afganistán (donde dicen que la guerra durará cuando menos ¡40 años!) pues como se podrá entender, no tienen ninguna prisa por terminarla, pues el motivo de su presencia se terminará con el fin del conflicto armado.

Cabiendo aclarar que, como el negocio de los EEUU es vender armas, éstas lo mismo se las venden a los gobiernos lícitamente establecidos, que a los que se oponen a ellos, a los narcotraficantes, o a quien sea.

Y es un muy mal augurio para América Latina que, siguiéndoles el juego, tratará de armarse (como ya lo declaró el Presidente venezolano Hugo Chávez)

Lo que ciertamente será punto menos que inútil, pues la perversidad de quienes fabrican y venden armas, es que se deshacen de las que tecnológicamente ya son obsoletas.

Solo que con esta infortunada decisión, puede iniciarse una “guerra fría” latinoamericana que en nada nos beneficiará a quienes históricamente no nos hemos podido deshacer del yugo colonialista.

Y no lo haremos, mientras utilizando las mismas armas suyas, las del consumismo, no llevemos a cabo un boicot a sus productos; pues cada Coca-Cola que se compra es una bala más que finalmente es utilizada en nuestra contra, si no para matar, sí cuando menos para amedrentar.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Por qué tanta crítica al consumismo? Recuerden: ¡Treinta pares de zapatos que uno compra le da trabajo a un chinito para vivir durante medio segundo!

¡Suerte y Éxitos!