miércoles, 8 de agosto de 2007

'No habla, escribió que tiene miedo'


Su hija Kerly relató que su padre está muy mal psicológicamente y llora todo el tiempo con el único ojo que le sirve, que puede mover.






Daniela Rea

Oaxaca, México (08 de agosto de 2007).- "T mido". Estas fueron las únicas palabras que Emeterio Marino Cruz ha podido escribir desde que salió del coma.

Policías oaxaqueños lo golpearon hasta mandarlo al hospital el pasado 16 de julio durante el enfrentamiento de la APPO en el Cerro del Fortín.

"Le dimos un lápiz y una hoja para que escribiera cómo se siente, porque no puede hablar, y eso fue lo único que pudo escribir, con letras mal hechas, temblorosas, con miedo", cuenta Kerly Marino Franco, de 17 años, su tercer hija quien está en la Ciudad de México para exigir justicia por la represión que sufrió su padre.

"T mido" significa tengo miedo, asegura Kerly. Su mismo padre se lo confirmó con un leve movimiento de sus dedos, la única parte del cuerpo que puede mover, pues los golpes propinados por la policía estatal le provocaron traumatismo craneoencefálico y coma durante tres días.

"Está muy mal psicológicamente, llora todo el tiempo con el único ojo que le sirve, que puede mover. Está preocupado por nosotros, porque nos puedan hacer daño después, por cómo vaya a quedar él y si se va a poder recuperar completamente", afirma Kerly.

Karen, la hija mayor de Emeterio, dice desde Oaxaca, en entrevista telefónica, que días después de la detención de su padre, patrullas de la policía estatal rondaban su casa. Los querían intimidar, asegura.

Hilaria Franco, maestra de la sección 22 y simpatizante de la APPO es su esposa y también en entrevista telefónica desde la ciudad de Oaxaca aclara que gracias a las protestas de sus familiares las autoridades del Hospital Regional de Alta Especialidad no lo darán de alta hasta que recupere completamente su salud.

Su esposo no es maestro ni simpatizante de la APPO, afirma, como lo ha señalado la autoridad ministerial, sino un albañil y plomero que acudió ese día al Cerro del Fortín a protegerla a ella y a su hijo menor de siete años quienes acudieron a la marcha, pues escuchó en las noticias el enfrentamiento con los policías.

Hasta el día de ayer, después de que Karen hiciera una rueda de prensa en Oaxaca para denunciar el trato y el estado de salud de su padre, se acercaron las autoridades estatales.

"Ningún funcionario del gobierno estatal nos había contactado nunca desde que golpearon a mi papá. Hasta el día de ayer se acercaron a nosotros el procurador (Evencio Nicolás Martínez) y el secretario de Salud del estado (Felipe Gama Casas), que se comprometió, sólo de palabra a pagar los gastos de su hospitalización".

El descuido a su padre era tal, que cuando fueron al hospital el día del enfrentamiento, en lugar de collarín tenía una sábana enrollada en el cuello y no había comido en toda la tarde.

A raíz de la rueda de prensa les dieron un cuarto y una enfermera particular.

El estado de salud del señor Marino es estable, afirma su esposa. Salió del coma el pasado 20 de julio, pero no puede comunicarse verbalmente, ni mover la mitad de su cuerpo y requiere ayuda para respirar.

Hasta el momento, agrega, la autoridad estatal no ha pagado ni un peso de su hospitalización. "Casi diario son mil pesos de medicinas. Hasta ahora no me han dicho de cuánto se va a pagar de su hospitalización y de la cirugía, pero me imagino que a la hora que salgamos nos van a decir cuánto fue".

La golpiza alteró la vida de toda la familia. Hilaria pidió un primer préstamo de 10 mil pesos a una caja popular y varios miles más a vecinos y familiares. Ya vendieron todas sus joyas. Pronto venderán la televisión y la computadora.

Los familiares crearon la página de internet www.emeteriomarinocruz.blogspot.com donde hay una cuenta de banco para recibir apoyo. Sin embargo sus hijas y su esposa exigen que sea el gobierno estatal el que cubra los gastos de su hospitalización y rehabilitación.

"Así como lo detuvieron, quiero que me lo devuelvan. Y hago responsable al gobierno de Ulises Ruiz de lo que le ocurra a él y a mi familia", advierte Hilaria.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Es realmente indignante el abuso de autoridad y nepotismo de aquellos que se supone que están para cuidar la integridad de la ciudadania. Recientemente recibi una agresión e intimidación por parte de un grupo de policias y tránsitos del municipio de coatepec quienes despotamente y de manera agresiva abusaron de la pseudoautoridad que poseen. Ya no se sabe de quien hay que cuidarse si de los que portan uniforme y se dicen los buenos del cuento o de los delincuentes... quienes son peor? o son los mismos? Ya Basta!!! no es casualidad que el dia de ayer mataran al inspector de policia de Coatepec y a otros más, todos estan corrompidos, son ellos el mal de nuestra sociedad. Y el caso de el señor Emeterio esperemos que no sea uno mas de los casos impunes en este país. ALTO AL ABUSO DE PODER !!! ALTO AL MIEDO !!!