miércoles, 26 de septiembre de 2007

CHOCAN NORMALISTAS Y POLICIAS





Tomaron la radiodifusora en protesta porque el titular de la SEG no los recibió

Se enfrentan normalistas y policías en desalojo a Radio Guerrero

El saldo de los disturbios fue de varios heridos leves en ambos bandos, y daños materiales

Antes, los normalistas efectuaron un mitin en la entrada principal del palacio de gobierno

RUBICELA MORELOS CRUZ



CHILPANCINGO, 25 DE SEPTIEMBRE. Egresados de la Normal Rural de Ayotzinapa se enfrentaron a una docena de policías del estado luego que los agentes intentaron desalojarlos de la cabina de la paraestatal Radio Guerrero que habían tomado 10 minutos antes, en demanda de 95 plazas. El saldo de los disturbios fue de varios heridos leves en ambos bandos y destrozos en el Palacio de Cultura, donde se ubica la cabina, en el zócalo de esta capital.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 14 horas, luego de que la audiencia que tenían programada la mañana de este martes con el secretario de Educación, José Luis González de la Vega Otero, se canceló, y después de que el funcionario estatal, en conferencia de prensa, advirtiera a los ex normalistas que a aquellos que tuvieran una averiguación previa en proceso, no se les otorgaría plaza.

Los normalistas efectuaron un mitin en la entrada principal del palacio de gobierno y al terminó se trasladaron al centro de la ciudad. La toma de Radio Guerrero se llevó a cabo 15 minutos antes de las 14 horas, por unos 60 egresados que entraron al Palacio de la Cultura, desde donde se transmite Soy Guerrero, e hicieron lo mismo en Radio Universidad, frente a la alameda Granados Maldonado.

Cuando estaban en Radio Guerrero transmitiendo y criticando que el titular de la SEG no los había recibido en audiencia, se escucharon silbidos y gritos: “¡nos quieren sacar! ¡quieren golpearnos! ¡cierren! ¡cuidado!”, dijeron los normalistas y enseguida cerraron las puertas de la cabina.


Afuera, los policías arremetieron contra los egresados que no alcanzaron a entrar. Al aire, uno de los egresados decía “en estos momentos nos intentan desalojar, el gobernador Zeferino Torreblanca Galindo había dicho que había libertad de expresión; el gobernador había dicho que esta radiodifusora estaba abierta para todos; pero en este momento vemos que nos quieren reprimir, hacemos un llamado...” y se interrumpió la transmisión.

Luego cerraron la puerta de la cabina e hicieron una barrera detrás, pero había quedó abierta la de los controles técnicos, por allí entraron los agentes y se dio una trifulca entre estudiantes y policías lanzándose todo tipo de objetos que encontraron a su paso.

El enfrentamiento duró unos 10 minutos. Un policía intentó accionar una granada de gas lacrimógeno pero no pudo. En la refriega los egresados, que superaban en número a los agentes, arrebataron macanas y escudos. Con extinguidores, sillas, escritorios, macetas y bases de micrófono los ex normalistas se defendieron y obligaron a huir a los policías de allí. Sólo uno quedó en el área de controles.

Unos jóvenes intentaron golpearlo. El policía sin su escudo ni macana, temblaba, pero otros ex normalistas lo evitaron con el argumento de que su toma era pacífica y que no iban agredir; “pero tampoco vamos a permitir que nos golpeen”. En el tercer piso de donde se ubica la cabina de radio, accionaron y aventaron extinguidores para ahuyentar a los policías.

Como a las 2:10 de la tarde, afuera del inmueble todos los egresados encapuchados, con consignas repudiaron las “políticas criminales” de Zeferino Torreblanca Galindo y a gritos pedieron su salida.

Posteriormente se trasladaron a Radio Universidad, en donde continuaron con la transmisión y rechazaron el intento de desalojo violento de Radio Guerrero, por los policías estatales.

En la transmisión informaron que uno de sus compañeros que fue golpeado por los policías, estaba recibiendo atención médica. Responsabilizaron a Torreblanca Galindo y al titular de la SEG de cualquier acto de represión o persecución en su contra. Asimismo anunciaron más movilizaciones como medidas de protesta, en exigencia de las 95 plazas.

La jornada de ex normalistas

Antes de las 8:40 a las 10:30 de la mañana, los egresados de Ayotzinapa tomaron la cabina de la radiodifusora privada XEPI, ubicada en Tixtla, en donde exigieron al gobierno de Zeferino Torreblanca Galindo 95 plazas y que la audiencia que iban a sostener con el titular de la SEG fuera de carácter resolutiva, “no explicativa”.

La reunión era en el palacio de gobierno a las 11:30 de la mañana, pero a los egresados no se les autorizó el paso, pues iban acompañados por profesores de zonas escolares en donde hacen falta maestros y por dirigentes de organizaciones sociales.

Minutos después del medio día en el salón el titular de la SEG ofreció una conferencia de prensa en donde lamentó que los egresados “no entraran” a la audiencia, en la que los esperaba. “Lamentamos que los jóvenes de Ayotzinapa no estén aquí para la reunión acordada”, dijo el funcionario estatal.

Allí negó que los acompañantes de los egresados fueran supervisores de zonas escolares y desconoció también las listas que llevaban los egresados, en donde al menos se requieren de 100 docentes para atender a mil alumnos, sólo en el municipio de Tlacochistlahuca.

Durante esta misma conferencia de prensa, advirtió a los egresados que enfrentan un proceso penal que no recibirían ninguna plaza. “Quien tenga una averiguación previa no tiene derecho a plaza, eso dice la norma”, sentenció González de la Vega.

Informó que este año esperan distribuir 356 plazas (que les envía la Federación, ya les dieron 90), que asignarán a las nueve normales públicas del estado (en total egresaron alrededor de 600 alumnos), aunque aclaró que 50 por ciento pertenece a la sección 14 del SNTE, y según el funcionario estatal, aún José Natividad Calixto no ha dicho si se las van ceder a los egresados o no.

Los que enfrentan procesos penales

De acuerdo con un oficio que emitió la Unidad de Archivo Criminalístico de la Procuraduría de Justicia del Estado (PGJE), hasta el miércoles 12 eran nueve egresados de la generación Lucio Cabañas Barrientos los que enfrentan procesos penales: “un registro de José García Serrano; dos registros contra José Hernández Pacheco; un registro de José Antonio Hernández Morales; cinco registros de José Angel Román Espinosa; cuatro registros de Crisoforo García Castro.

“Cinco registros de Armando Campos Ochoa; dos registros de Omar García Cortés; dos registros de Oscar Cotino Molina y tres registros de Patricio Gallardo Torreblanca”, señala el documento.

Sin embargo, con las últimas movilizaciones que han hecho como egresados, dijeron que ya todos han de presentar procesos penales.

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